viernes, 28 de noviembre de 2014

Concepciones y estrategias para producir aprendizaje en una educación inclusiva

1era Parte


Nuestra premisa: La Educación Inclusiva es la única posible cuando asumimos la diversidad como una condición “sine qua non” de lo humano y cuando nos comprometemos con la calidad.

La rotulación de “estudiante con problemas” puede explicarse como una de las formas de control ejercidas por el Estado directamente sobre la educación. Henry Giroux (1985).

Tal y como plantea Berta Braslavsky (2000): “Las dificultades de aprendizaje que presentan los niños en el aula se deben en gran medida a que las actividades, los contenidos, las metas, propósitos y fines del curriculum regular no les resultan significativos ni tampoco se ven reconocidos en él como sujetos portadores de potenciales.

Para Murillo, Kricheksy, et. al (s.f.), el propósito de la educación inclusiva debe ser eliminar todo indicio de exclusión ya sea por la pertenencia a determinada clase social, etnia, religión, género o bien por la orientación sexual, la lengua materna, cultura de origen o la manifestación de ciertas habilidades (p. 170).

Enfaticemos que la Educación Inclusiva enfrenta a la noción tradicional de “educación especial”. La Educación Inclusiva también enfrenta a la concepción de Educación Integradora.

La experiencia educativa que se deriva de la concepción de Educación Inclusiva primero, no se enfoca en “enseñar” sino en promover el desarrollo de las capacidades a través de acciones significativas para quienes aprenden; y segundo, es necesariamente flexible, pues se trata de atender la diversidad que nos conforma como personas, como los seres humanos que somos. 

Para Cinthia Duk (s.f.), el mayor desafío que enfrenta en la actualidad, la mayoría de los países, es cómo hacer efectivo el derecho que tienen todos los niños y las niñas de acceder a la educación y beneficiarse de una enseñanza de calidad adecuada a sus necesidades individuales de aprendizajes.

A este respecto, Humberto Maturana argumenta de una forma rotunda que sólo existe la diferencia; puesto que la estructura corporal está en continuo cambio y en su modo de operar no hay errores ni disfunciones. Estas “disfunciones” pertenecen a un “discurso comparativo” producido en el espacio de relaciones humanas y no a su biología.


Excluir a niños o niñas y adolescentes por ser diferentes no beneficia al resto de la clase, puesto que se pierde su individualidad o idiosincrasia y el aporte que supone a  la diversidad, dado que ayuda a aprender a vivir aceptando la diferencia.  Muy al contrario, limita las oportunidades que habrían podido surgir de contar con un grupo heterogéneo.

¿A qué nos referimos con “contexto de diversidad”?

  • Las diferentes necesidades biológicas
  • Las diferentes inteligencias
  • Las diferentes etapas del desarrollo cognoscitivo
  • Los diferentes estilos de aprendizaje
  • Los diferentes estilos de personalidad
  • Las diferentes relaciones familiares y comunitarias
  • Las diferentes culturas



“La escuela trabajaría tanto mejor, cuanto mejor pudiera utilizar instrumentos que la ayudasen a posibilitar que los estudiantes ejerciten su curiosidad de saber.” Paulo Freire. Pedagogía de la Autonomía.


1 comentario:

  1. La educacion incusiva no se enfoca en esenar, sino, en promover el desarrollo de las capacidades individuales para producir acciones significativas y, la flexibilidad, me parece son la base del modelo constructivista.

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